Los vertiginosos cambios e innovaciones que se dan día a día obligan a, cada vez más, edificios al uso de tecnologías de la comunicación e información (conocidas como TIC) por parte de las comunidades. Las empresas de administración de edificios se valen de las tecnologías para comunidades para facilitar la gestión y uso de los procesos administrativos y gastos comunes.

Esta es una tendencia que va en crecimiento, por ejemplo, el uso de la tecnología móvil. Este recurso es uno de los protagonistas principales en la comunicación entre copropietarios; ya que se utiliza para convocar reuniones, presentar quejas y reclamos y someter asuntos a consideración.

Algunas TIC compatibles con las necesidades de las comunidades

En principio podemos señalar los softwares de administración, que constituyen una importante herramienta en la administración de condominios y edificios. Este instrumento tecnológico, si bien no es gratuito, tiene la ventaja de permitir sustanciosos ahorros en las cuotas mensuales al promover la autogestión.

Páginas web de la comunidad, que incluyen avisos que involucren a los copropietarios: gestión de los espacios comunes, quejas, sugerencias y demás asuntos de interés comunitario.

Grupos de redes sociales como WhatsApp o Facebook: estos grupos son la forma más inmediata de comunicación entre los distintos miembros de una comunidad.

Correos electrónicos: Permiten el ahorro de papel y tinta de impresora, además de que constituyen un medio de comunicación expedito y eficaz, para la emisión y recepción de información.

Los pros y los contras en el uso de las Tecnologías para Comunidades

Entre las innumerables ventajas que aporta el uso de las tecnologías de comunicación e información por parte de los condominios están la rapidez, la economía, el alcance y la posibilidad de autogestión.

Por otra parte, entre los posibles contras o desventajas podemos señalar que no todos los propietarios tienen acceso a la tecnología; existen personas que no conocen las nuevas tecnologías o carecen de recursos para acceder a ellas.

Otra dificultad adicional sería la necesidad de capacitar a los usuarios en el uso de algunos softwares; sin embargo, este inconveniente es susceptible de ser subsanado, pues las compañías proveedoras ofrecen, también, la capacitación del personal.

Para satisfacer las expectativas de los copropietarios, gran cantidad de condominios han integrado o están comenzando a integrar las tecnologías para comunidades;  esta le ha permitido al administrador llevar las operaciones de forma más efectiva y, en consecuencia, mejorar la gestión del condominio y disminuir los gastos.

Y es que, cuando hablamos de comunidades o condominios,  esto se traduce en trabajo efectivo;  por lo que adicionar la tecnología supone un gran reto, porque el objetivo principal a cumplir sería que la tecnología no dificulte o entorpezca la gestión del administrador, sino que la fortalezca.

Es posible que algunas comunidades no puedan permitirse el lujo de adquirir todas y cada una de las novedades tecnológicas que salen al mercado; sin embargo, en la actualidad, la adquisición de la tecnología para comunidades está tendiendo a ser más accesible y con propuestas de formación adicionales a la contratación de los servicios.

Esto último es un punto importante a considerar, debido a que la implementación de tecnología sin formación del personal es una mezcla dañina para cualquier proyecto tecnológico.